Uno de los restaurantes más tradicionales de la alta cocina mexicana es sin duda El Cardenal. Esta tradicional cadena de restaurantes se fundó en 1969. El que fuera originalmente el primer restaurante, ubicado en lo que era la Real y Pontifica Universidad de América ya no es más parte de El Cardenal. Hoy en día encontramos cinco sucursales de esta cadena.  Recientemente comí en el ubicado sobre Avenida de la Paz número 32, San Ángel, al sur de la Ciudad de México y ocupa una preciosa casona porfiriana. Esta sucursal ha sido una de las últimas en abrir sus puertas al público, y la única ubicada al sur de la
capital. Cerca de zonas como Coyoacán, es una opción para los viajeros y gastrónomos en el sur de la metropoli.

 Entrada del Cardenal San Ángel

 

En este excepcional lugar se ofrece una gran variedad de alimentos tradicionales de la cocina mexicana: desde mole hasta los escamoles, conocidos como el caviar mexicano. Todos ellos con un nivel superior al promedio de los restaurantes mexicanos. Es una buena idea comenzar la aventura gastronómica con un tradicional molcajete de salsa verde con queso y aguacate; además de los mencionados escamoles en mantequilla y epazote. Eso es justo lo que se hizo en esta ocasión.

 Mezcal con naranja y su chile

Chile Relleno de frijol

 Como me es costumbre en casi todo restaurante mexicano donde haya esta sopa, pedí una de fideo seco al chipotle para comenzar. Siguiendo este platillo, comí atún sellado en una deliciosa salsa de queso. Todo de un extraordinario nivel. Quienes me acompañaban ordenaron tacos de barbacoa, carnitas y lengua; carnitas de atún, chile relleno de frijol, pescado a la veracruzana, entre otros
platillos.

 Ceviche de atún

Tacos de carnitas

Delicioso mole de olla

 

Mole de cadera

También pueden disfrutarse postres tradicionales de altísima calidad como la natilla, ate con queso o algún pastel. Además, acompañar el postre con un café, ya sea de olla o cappuccino, es un gran acierto para terminar la comida, cena o desayuno.

 

Plátano frito con helado

Los meseros aquí tienden a brindar atención de manera relativamente rápida y eficiente.  Es raro se tenga que esperar por algún alimento, salvo que tome tiempo preparar el platillo. Sin embargo, es un restaurante más cercano al slow food que a su contraparte, por lo que no esperen terminar de comer en quince minutos.

Antes de concluir, es importante tomar en cuenta al ir a comer a alguno de los varios Cardenales existentes, que sus precios son elevados. Por lo que estén preparados para evitar una sorpresa a la hora de recibir la cuenta.

Si se desea conocer la comida tradicional mexicana de alto nivel, este restaurante es un referente obligado para cualquiera. Puede tratarse de una comida de negocios, celebración o por el simple gusto de disfrutar una comida deliciosa, esta será sin duda una gran elección.

Conclusiones El Cardenal

 Ambiente: La casona donde se encuentra ubicado el restaurante es preciosa, de manera que comer ahí es una experiencia muy agradable. Además, el lugar está decorado con muy buen gusto y se percibe bello el lugar, lo que hace nuestra estancia se disfrute más.

 Servicio: Los meseros atienden de manera eficiente y muy amable. La comida se sirve en tiempo moderado para dar tiempo entre platillo y platillo, pero sin tardar tanto como para que uno lo resienta.

 Alimentos: Como ya se ha mencionado, la comida en este lugar es fuera de serie. Razón por la que este lugar es un referente de la alta cocina mexicana. 

 Precio: Son elevados, pero justos considerando la extraordinaria calidad de los alimentos encontrados en este lugar