Hace un año tuve la oportunidad de estudiar por dos meses en Yale University en New Haven, Connecticut, en los Estados Unidos. New Haven es un pueblo relativamente pequeño con una población que no llega a los 150, 000 habitantes. A pesar del tamaño reducido de la ciudad, la riqueza cultural que gira en torno a la universidad permite disfrutar del tiempo que se pase en esa ciudad.
Para comenzar, los edificios de la universidad bastan para disfrutar varias horas. Desde las residencias universitarias a los salones de clases se pueden encontrar innumerables castillos o muestras insuperables de la arquitectura de la Nueva Inglaterra (la universidad precede a la Independencia de los
Estados Unidos de América). Los edificios más modernos son ejemplos de lo mejor de la arquitectura contemporánea.
Dentro de los edificios, cabe prestar especial atención a la Biblioteca Sterling. El edificio es uno de los más impactantes y grandes (en extensión) de la universidad. Se puede acceder a una pequeña sección sin necesidad de una credencial de miembro, en donde se puede ver una pequeña muestra de cómo es el resto de la lujosa biblioteca; una delicia para todo aquel que es amante de libros.
Otro punto a destacar es la posibilidad de subir al campanario de la Universidad en la Torre Harkness. La torre Harkness es posiblemente el edificio más alto de la universidad y sin duda alguna el más llamativo a lo lejos. Dentro de este edificio se encuentra el campanario de la universidad, que está a cargo de algún grupo selecto de estudiantes de música de la casa de estudios. Para poder acceder a esta atracción es necesario agendar con anticipación una cita (en línea) para que alguno de los estudiantes que tocan el campanario pueda dar una visita guiada. Sin duda es algo que vale la pena realizar.
Además de esto, la universidad cuenta con una buena cantidad de museos. De todos estos destacaría dos de ellos: el Museo Peabody de Historia Natural y la Galería de Arte de Yale. El primero de estos cuenta con una extensa y bella colección de restos fósiles o de animales disecados. Por su parte, la galería de arte cuenta con obras de muchos de los grandes maestros del arte como Pablo Picasso, Vincent van Gogh, entre otros.
Finalmente, uno de los últimos lugares que es imperativo visitar es la biblioteca Beinecke de Libros Raros. Esta biblioteca se centra en ejemplares raros. Podemos encontrar en su colección, entre otros ejemplares, la Biblia de Gutenberg o el Manuscrito de Voynich. En esta biblioteca se puede perder uno un buen rato viendo las rarezas que pudiera encontrar.
Para poder llegar a New Haven, y por ende a la Universidad de Yale, lo mejor es volar a Boston o Nueva York y tomar un servicio de Shuttle. El camino tarda aproximadamente dos horas. Si uno ya se encuentra en Nueva York o Boston, puede tomar el tren hacia la estación de New Haven.
2 comentarios
Me encanta esta universidad!
Es preciosa!