La lectura es una de las actividades predilectas de muchos viajeros. Especialmente  para amenizar los trayectos de un destino a otro. Ya sea en barco, avión o tren, un buen libro es un compañero imprescindible. 

Los viajes cortos y largos requieren lecturas distintas. Uno se puede concentrar más en un vuelo de 7 horas que en uno de dos. Aunque esto puede cambiar según las necesidades personales y profesionales de cada uno. 

Lo primero que buscamos en la lectura es entretenernos y relajarnos mientras nos encontramos en camino hacia nuestro destino. Es por eso que envolvernos en la atmósfera y el contexto de la lectura es muy importante. Además, la lectura trae muchos beneficios cognitivos.

No es lo mismo una persona que se entretiene leyendo el periódico durante su trayecto a una persona que es amante de la divulgación de la ciencia y la academia; incluso, existen esas personas que buscan, a través de la lectura, quedarse dormidos en el viaje y olvidarse de que tienen un vuelo trasatlántico. 

Hay destinos que también favorecen la lectura. Si uno va a pasar varios días en una playa, una novela puede complementar nuestra estancia. En sentido contrario, si el viaje es a una concurrida metrópoli, posiblemente no haya tiempo para leer.

Lectura para viajes cortos

Si nuestro trayecto de un lugar a otro es de unas pocas horas -o menos- es buena idea una lectura corta y ligera. Cuentos cortos y poesía son ideales porque te permiten disfrutar un vuelo corto y no necesitan una concentración tan profunda la cual posiblemente no puedas obtener en estas situaciones.

Algunas lecturas sugeridas para este tipo de vuelos es el libro corto de Tim Burton “The Melancholy Death of Oyster Boy and other stories”. Ahora bien, aunque este libro es considerado “infantil”, hay que proceder con cautela. Esto porque los dibujos que el famoso cineasta, y las historias plasmadas, pueden ser un poco perturbantes para lo más pequeños.

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“El Principito”, la obra más famosa de Antoine de Saint-Exupéry, es tal vez un libro idílico para un viaje corto. Agradable de leer, así como con enseñanzas para el lector. Además, varias lecturas de este texto nos permite descubrir diferentes niveles de lectura. 

Si se tiene una hija pequeña, se le pueden leer algunos cuentos plasmados en los “Cuentos de Buenas Noches para Niñas Rebeldes” de Elena Favilli y Francesca Cavallo. 

Como ejemplo de poesía que permita disfrutar más un viaje corto podemos encontrar los “Veinte poemas de amor y una canción desesperada” del Premio Nobel chileno Pablo Neruda. Tal vez uno de los mejores libros de poesía en español. 

Siguiendo con la literatura latinoamericana, el “Bestiario” de Julio Cortazar es también otra extraordinaria opción como lectura en un viaje corto.

Si se busca literatura un poco más extensa, las novelas cortas de “Alicia en el País de las Maravillas” y “Alicia a través del Espejo” de Lewis Carrol o “Pedro Páramo” de Juan Rulfo son alternativas que sin duda nos dejarán un gran sabor de boca. .

Lectura para viajes largos

Los viajes largos permiten concentrarse más en una lectura. Por esto, una novela se vuelve la compañera perfecta de un viaje trasatlántico. 

Series de novelas como “Historias de Terramar” de Úrsula K. LeGuin o “Harry Potter” de J.K. Rowling han acompañado a incontables viajeros, y con justa razón. Volar por horas permite adentrarse en el libro sin distraerse por más tiempo del que usualmente tenemos en tierra. 

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Novelas como “Eso” de Stephen King o la “Última Guía del Viajero Intergaláctico” de Douglas Adams se ven favorecidas. De la misma manera, compilaciones como el Necronomicon de H.P. Lovecraft permiten adentrarnos en mundos de fantasía para ir a lugares ídem.

Recomendación especial

Ingenuidad que sucede justamente en un hotel de playa, ¿qué más ad hoc para un viaje? Esta hilarante novela y ¿filosófica? es lo suficientemente ligera para disfrutar en cualquier tipo de viaje. Además, al leerla apoyan a Zorro por el Mundo, porque el autor es nuestro colaborador. Si tienen interés en leerla, la encontrarán en esta liga. 

La historia nos adentra al mundo tras banbalinas de un hotel. ¿Qué viven los que hacen que vivamos vacaciones de ensueño? 

Conclusión lectora

Un buen libro es siempre un gran compañero para nuestros viajes. Encontrar el libro perfecto puede hacer un viaje perfecto aún mejor. A ustedes, ¿qué libros les han gustado en sus viajes?

Estas lecturas nos ayudan a pasar un rato más agradable. Se puede transformar un pesado vuelo en un recuerdo lindo. Una estancia en la playa o en una cabaña se disfruta más con una lectura que maride la experiencia.