Cuando se visita Irán y no se tiene mucha idea de qué esperar, muchas de las atracciones sorprenden. Todavía muchas personas no se animan a visitar el legendario país del Medio Oriente, pero es buena idea hacerlo. Hay lugares que siguen maravillando a pesar de visitarlos varias veces. Uno de estos es el Palacio de Golestán.
A partir del 2013 el Palacio ingresó como Patrimonio Mundial de la Humanidad de la UNESCO. No es por nada, pero pudo haber sido mucho antes.
Historia del Palacio de Golestán
Para entender la suntuosidad de este lugar hay que saber que fue la residencia oficial de los reyes de Persia –o Shahs- durante la dinastía Kajar o Qayar. Dicha dinastía gobernó entre finales del siglo XVIII y principios del siglo XX. Si nos ponemos a pensar, en realidad fue poco tiempo aunque los primeros edificios databan del siglo XVI.
El palacio sufrió remodelaciones y expansiones durante esta época, lo que le da un estilo ecléctico. De esta manera podemos disfrutar de la evolución del arte islámico: desde la ya mencionada dinastía y los estilos de las cerámicas hasta las influencias europeas.
Durante el siglo XX, la última dinastía de reyes: los Pahlavi, usaron el lugar para eventos. Esta dinastía se fue a vivir al complejo Niavaran. Tristemente también destruyeron algunos de los palacetes más antiguos y dejaron que se construyeran edificios con usos comerciales.
Detalles de la Visita
El Palacio se encuentra en el centro de la ciudad de Teherán. Hay varias formas de llegar a este lugar: en coche particular (no es muy caro contratar uno en Irán y vale la pena), Taxi o Snapp –el Uber de Irán, altamente recomendado –, camión o metro (estación Panzdah Khordad).
Una vez llegado hay que comprar la entrada y considerar que algunas partes del recorrido tienen un costo extra. Para entrar al patio y los jardines se tiene que pagar 150,000 riales iraníes. Esto puede sonar mucho por tantos ceros, pero en realidad son aproximadamente 3.50 USD según el tipo de cambio. Luego, para entrar al salón principal o de los espejos hay que pagar otro tanto igual. De verdad vale la pena.
Otras salas cuestan hasta aproximadamente 80,000 riales, o 2 USD, y dependiendo qué está abierto y el tiempo de visita sí recomendamos visitarlas. En caso de no tener mucho tiempo, se pueden escoger unos cuantos. Si se tiene tiempo y quiere visitarse todo, se tendrían que presupuestar 1,000,000 de riales (25USD). Algunas partes, además del despliegue arquitectónico, tienen colecciones adicionales como regalos hechos a los reyes, pinturas, o fotografías.
El horario de visita es de 9:00 a 17:00. A diferencia de otros lugares de otros museos iraníes, abre todos los días. Solo hay que considerar que el viernes es el día de descanso y puede verse una mayor afluencia de visitantes.
Atracciones
Jardines
Como mencionamos, para acceder a estos se requiere un boleto. Pero ver la arquitectura, las fuentes y los jardines justifica el precio de entrada.
Trono de Mármol
Un impresionante trono de mármol de la región de Yazd en una terraza con espejos.
Khalvate-e Karim Khani
Zona de arcos y fuentes que recuerdan lo mejor de la arquitectura persa, con sus azulejos y colores.
Salones Principales
Los salones majestuosos, desde el denominado de los espejos, hasta el de los diamantes.
Dejamos una serie de postales con su descripción para poder entender la belleza de este lugar.
Talar-e Berelian
Salones con espejos que demuestran porque este lugar es imperdible.
Emarat-e Badgir
Edificio con torres de viento, el aire acondicionado natural
Conclusiones
No cabe duda de que este palacio es una atracción que debe estar en la lista de cualquier viajero que ame la cultura, la arquitectura y/o la historia. Tan sólo por este lugar vale la pena visitar Irán. Es importante planear con antelación cuánto tiempo se quiere estar aquí para presupuestar y agendar en la lista de muchas otras cosas por disfrutar. El Palacio de Golestán es una joya de la humanidad.
5 comentarios
Se ve de un lujo espectacular. Podrian comentarnos que época es buena para visitar esta joya
Durante las cuatro estaciones del año se puede visitar Irán. Claro, que el paisaje cambiará un poco según el mes en que se vaya. En invierno puede haber nieve y en verano hará calor. Para evitar climas extremos finales de la primavera u otoño pueden ser opciones convenientes.
Un alarde de ingeniería y arquitectura, tanto lujo y tanto espacio te roban la atención por varios días.
Es tan hermoso
Extraordinario lugar, gracias por enseñarnos tantos lugares interesantes.