Una de las labores más difíciles en los viajes es realizar un presupuesto. Queremos ser detallados para cuidar el dinero que tanto trabajo nos costó ganar. Pero la realidad es que hay veces que gastamos de más. Y usualmente hay cosas que olvidamos presupuestar para nuestros viajes.

Somos muy detallistas en incluir en el hospedaje, los boletos de avión o renta de automóvil. Pero hay otros rubros que dejamos fuera. Estos son los que hacen que no respetemos nuestro presupuesto y terminamos gastando de más.

Impuestos

Hay muchos impuestos que se pagan en el destino y que pasamos por alto. Una de las cosas que olvidamos presupuestar es este tipo de impuestos.

En algunos casos, los hoteles cobran impuestos ecológicos con cada noche de hospedaje. Usualmente, no son grandes cantidades. Sin embargo, en unas vacaciones largas se termina pagando una cantidad considerable que no habíamos tenido en cuenta originalmente.

Otro de los impuestos que cobran los países son los impuestos de salida. Algunos ejemplos son Australia, Costa Rica y recientemente Japón. Muchas veces las aerolíneas ya los incluyen en nuestros boletos. Pero otras veces no y hay que pagarlo. Después de haber gastado mucho en nuestro viaje ya es doloroso.

Hay países que no incluyen los impuestos de venta en los artículos de las tiendas o restaurantes. Por lo que un viaje de compras, o “shopping” puede salir un porcentaje más caro. Esto es más común en países como Estados Unidos o Canadá, donde este tipo de impuestos son de corte estatal.

Resort Fees

Ya hemos hablado de por qué odiamos los Resorts Fees a detalle. No obstante, este artículo es una buena oportunidad para recordarlo.

En Estados Unidos y algunos otros países como los del Caribe, los hoteles tienen la costumbre de no ser transparentes en lo que cobran.  La tarifa que aparece en el sistema de reserva o en los metabuscadores no es la tarifa final. Entonces, hacemos nuestro presupuesto y a la hora de pagar tenemos que pagar un porcentaje adicional.

Algunas veces los resort fees incluyen cosas que pueden ser interesantes. Pero la mayor parte de las veces son cosas que deberían estar consideradas en el cuarto o extras inútiles. Es importante que no sea de las cosas que olvidamos presupuestar.

Para esto, lo mejor es leer las letras pequeñas. Si deseamos continuar con nuestra reserva, adelante. Sólo hay que ser conscientes de lo que vamos a pagar.

Seguro de Viajes

Muchos destinos nos piden seguros de viajes. Aunque a veces no lo soliciten, puede ser motivo para que nos denieguen la entrada. Una de las cosas que olvidamos presupuestar es este rubro. Además de ser cuestión de vida o muerte, literalmente.

Hay muchos tipos de seguros para los viajeros. Hay que revisar el que nos conviene dependiendo nuestra edad, condición de salud y también el destino y las actividades que vayamos a hacer.

Propinas

Mientras que en Japón las propinas son algo de mal gusto, en otros destinos es algo esperado. Va a depender mucho de los lugares a dónde vamos. Por ende, se debe investigar bien las costumbres del destino y los posibles servicios que vamos a consumir.

En muchos lugares, ya sea un tour privado o en grupo, se espera darle propina a los guías y a los choferes. En otros destinos la propina incluye a taxistas y otros proveedores de servicios básicos. Y en algunos lugares –como en Egipto—querrán propina hasta por darte papel de baño.

El tema de la propina es muy polémico pero en ciertos lugares es de lo que viven los proveedores de servicios turísticos. Investigar y presupuestar hará la diferencia para ellos y para nosotros.

Emergencias

Hemos hablado de las realidades de los viajes y que hay cosas que pasan. No podemos saber todo aquello inesperado que acontece. Pero sí que hay imponderables. Muchas veces estas situaciones nos desbalancean el presupuesto.

Por lo tanto, es importante que no sean de las cosas que olvidamos presupuestar. Una emergencia puede ser desde pagar una noche de hospedaje adicional, una comida no contemplada o alguna dificultad. Hasta tener que pagar trámites, pagar un servicio médico (algunos seguros nos pagan por reembolso la emergencia).

En conclusión, es importante dejar un guardadito para esas cosas que no sabemos que puedan pasar.

Gustos

Llegamos a un lugar y descubrimos que hay algo típico de ahí. Además, de que no lo vamos a encontrar en ningún otro lugar. Ya gastamos mucho para llegar y sería una pérdida no probar algo o llevarse ese recuerdo que hará la diferencia en nuestra casa.

Una buena planeación nos puede ayudar a saber que en Santorini hay un vino que solo ahí se hace, que en Irán vamos a encontrar unos tapetes majestuosos o que la India es un excelente lugar para comprar telas coloridas. Pero a veces no lo hacemos y al llegar a nuestro destino queremos adquirir un producto.

No siempre sabemos lo que nos gustará algo tanto como hasta el momento que lo vemos en vivo. Por lo que dejar un apartado para consentirnos siempre es buena idea.

Visas o permisos de entrada

Las visas son un trámite que puede ser desde pagar hasta algo muy engorroso. Dependiendo el país y la estancia, es la visa que deberemos sacar. Usualmente no son muy costosas aunque hay que considerar el tiempo y los traslados.

Algunos destinos ya aceptan eVISAs. No son particularmente difíciles de obtener, pero hay que desembolsar con la tarjeta de crédito. Otros países pedirán que se pague vía transferencia bancaria.

No siempre es mucho dinero, pero si viajan varias personas ya puede sumar una cantidad interesante. Además, considerando los otros rubros, ya cuentan los extras.

Tours de último momento

Resulta que llegamos a un destino y descubrimos una atracción que no conocíamos. Si bien, una planeación adecuada nos puede evitar esto, la realidad es que no siempre se puede saber todo desde lejos. Por lo que un tour adicional nos puede llevar a ese lugar que nos atrae.

Dependiendo la fecha y el tour, puede ser una cantidad fuerte. Al menos habría que dejar lo suficiente de otro día de tour extra.

Conclusiones cosas que olvidamos presupuestar

Viajar es una inversión. Hay personas que viajan con presupuestos muy apretados y cuidando cada centavo. Otros más, deciden gastar un poco más holgadamente. Al final, todos tenemos un presupuesto que queremos cuidar. Sin embargo, hay cosas que olvidamos presupuestar que pueden hacer que gastemos más de lo que estimábamos.

Considerar las cosas enlistadas en este artículo nos permitirá tener un presupuesto más real y a su vez no estar sufriendo si tenemos imprevistos.

El peor de los casos es que no usemos este dinero y lo ahorremos para el próximo viaje. No es necesario cambiarlo a la moneda local si usamos tarjeta de crédito.