Fecha de Visita:
14 de octubre del 2016 (entre 16:20 y 17:00)
En la ciudad de México, Aeroméxico tiene dos salones para sus pasajeros clase Premier y ambos se encuentran en la Terminal 2. Uno es para los pasajeros viajando en vuelos nacionales y se supone que el otro es para los vuelos internacionales. En teoría, ésta distinción es porque originalmente, cada ala de la terminal era para ese fin y quedaba cada salón más cerca a donde saldrían los vuelos. La realidad es que ese criterio no se usa, y uno puede ir tanto a cualquier sala y salir de cualquier lado del aeropuerto sin importar si es nacional o internacional. En ambos salones se revisa la información de entrada antes de ingresar y si está saturado el salón, se pueden hacer unos minutos de fila antes de acceder. Para esta reseña se hizo una visita al salón nacional en la fecha y horario mencionados.
Vista del Salón Premier internacional que compartía el mismo diseño del nacional previo a su remodelación
Para acceder a los salones Premier, es necesario cumplir con algunos requisitos: viajar en clase Premier (el nombre que Aeroméxico le da a su business class), ser miembro Sky Team Elite Plus, Tener alguna de las tarjetas de crédito con convenio como American Express Aeroméxico (Oro o Platino) o las
de Santander (Platino con dos accesos e Infinite ilimatadamente). También pueden acceder los miembros de Priority Pass y Lounge Club. También lo han de poder usar los viajeros en business class de Delta, pues ellos no tienen un lounge dedicado. Cuando se viaja con Aeroméxico, indistintamente se puede usar cualquiera, pero en el nacional no vocean vuelos internacionales y viceversa.
Entrada del recién remodelado Salón Premier nacional. En el área hay varios empleados revisando los accesos.
Durante gran parte del 2016, el salón nacional estuvo cerrado por remodelación. La verdad es que ya hacía falta que se hiciera un trabajo mayor pues el salón ya notaba decadencia. Aeroméxico apostó por cambiar el concepto y creemos que falló. El salón anterior hacía uso de los grandes espacios de la terminal 2 y era muy agradable. Ahora, el salón está dividido por mamparas en acabado de madera, siendo que se siente mucho más pequeño y los espacios se desperdician. Instalaron algunas barras para pasajeros que quieran conectarse y viajen solos, pero son claustrofóbicas y por ende están desperdiciadas, por lo tanto es común ver mesas de varias personas (de dos o de
cuatro) ocupadas por una sola persona.
El Salón Premier se encontraba lleno y saturado alrededor de las 4:30pm. Muchos lugares estaban desperdiciados.
El diseño del salón facilita que se desperdicien muchos lugares. Tampoco optimiza el espacio dando sensación de lugar cerrado en lugar de dar privacidad.
El salón estaba demasiado lleno, pareciendo que está igual o más concurrido dentro que en la parte exterior. Se escucha mucho ruido y se pierde uno de los objetivos de ir a un salón que es relajarse. Que el salón esté saturado no sólo se ve reflejado en el ruido sino en el pésimo servicio que hay. En nuestro caso, tuvimos que hablar varias veces para que alguien se acercara a limpiar la mesa que ocuparíamos. Logramos pedir una bebida, y se trajo rápido, pero no hubo más contacto con el mesero.
Los servicios del salón son limitados, siendo un servicio de barra de bebidas (alcohólicas y no alcohólicas), botanas demasiado limitadas (totopos con salsa y cacahuates a granel de los que dan en Clase Premier, yogurts (¿a las cinco de la tarde?) y cafés (cappuccino, express, americano). Se nos prometió que habría más oferta de comida, pero después de cuarenta minutos no llegó, por lo que fue
mejor partir hacia otra sala de espera del aeropuerto.
Servicio limitado de comida en el Salón Premier: totopos y salsas industriales.
De lo poco que hay disponible en el servicio: yogurts que están disponibles para desayuno, comida y cena
La barra con las botanas está muy descuidada, y seguramente es consecuencia de la poca atención que se le da. Hay un refrigerador con bebidas, y muchas de estas ni siquiera están frías. Mientras que una parte con café está sucio y se nota que no se limpió a lo largo del día.
Servicio de café que no es atendido por los meseros
El Salón Premier no es competitivo con otros “lounges” internacionales y el producto, a pesar de ser “insignia” de Aeroméxico, deja mucho que desear. El personal de limpieza es ineficiente, pues todo el tiempo estuvo una persona aspirando (y contribuyendo al ruido), sin embargo no se notaba el lugar pulcro. La oferta de bebidas en realidad es mala. Cualquier salón pequeño secundario de una gran aerolínea tiene mejor oferta (el de Air France en Chicago o Maple Lounge de Air Canada en los Ángeles).
Para los usuarios de Priority Pass, si tienen la membresía es la que requiere pagar 27 dólares por persona para acceder o tienen 10 pases anuales, sugerimos no gastarlos aquí.
4 comentarios
Prefiero el diseño anterior, daba la sensacion de ser un salon mas grande y ademas tenian arboles y plantas que daban un toque de naturaleza al salon.
Hola FreddyNonStop. A nosotros también nos gustaba más el salón anterior. Era más espacioso, y tenía mejor aprovechamiento del espacio. Lo que menos nos gustó, es que sólo se enfocaron en cambiar el diseño, pero no en mejorar las opciones para los visitantes: mayor variedad y calidad de comida o servicio, otras opciones de bebida o entretenimiento.
Nunca he entendido porque no somos competitivos, se requiere tan poco, atención y calidad,